sábado, 23 de julio de 2011

Cerrado por obras



Ahora me doy cuenta, ahora lo entiendo y todo encaja. La posibilidad de quedarme despierta hasta altas horas de la madrugada me ha dado la oportunidad de ordenar todo ese caos mental que me rodeaba. Y me encanta, esa sensación que me inunda, de pluma, de hoja que cae ligeramente navegando por el aire hasta acostarse en el suelo. Estoy relajada, tranquila, y sonrió con facilidad. Ya no hay presión en el estomago. Vivo despreocupada.


Ya no hay nada, y eso es perfecto.

2 comentarios:

  1. Soy seguidora diaria de tu blog, hay muchas netradas que me gusta releer, son geniales :) pero sobre todo esta tiene algo, no se llámalo un cosquilleo, me entra cada vez que lo leo y recuerdo mis noches, mis madrugadas escribiendo sin poder parar, porq a mi inspiración le encanta aparecer en las horas menos oprtunas, pero aún así me encanta esa sensación de tranquilidad que me da la noche:) Hace poco me abrí un blog, intento obligarme a ir publocando diariamnte mi "intento de libro" si esq a eso se le puede llamar así, te dejo el enlace, espero que te guste. un beso!http://admitiendoverdades.blogspot.com/

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  2. Me ha encantado la entrada. Hace poco yo también me empecé a sentir así =).

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